Tratamiento de sobrepeso y obesidad: Balón Intragástrico
El objetivo es obtener una pérdida de peso controlada y sostenida.
La obesidad aumenta el riesgo de padecer múltiples enfermedades, entre las que destacan los problemas cardiovasculares, la diabetes mellitus, insuficiencia venosa (várices en las piernas), la colelitiasis (piedras en la vesícula biliar), entre otras. Además empeora claramente la calidad de vida del paciente así como su longevidad.
Los métodos convencionales frecuentemente fracasan (dieta y ejercicio) o no son suficientes, además que la cirugía conlleva un costo elevado y es un procedimiento que requiere varios días de internamiento y recuperación. Por ésta razón, surgen nuevas técnicas menos invasivas destinadas a contribuir al tratamiento de esta enfermedad.
El balón intragástrico es un procedimiento temporal y por lo tanto reversible para disminuir de peso de forma significativa. Se trata de una esfera de silicona plegada que se introduce en el estómago, durante una endoscopia.
Procedimiento
La endoscopia es un procedimiento ambulatorio que dura aproximadamente 30 minutos y se realiza bajo sedación (medicamentos a través de la vena). No se necesitan incisiones ni hospitalización.
El balón se rellena con suero y se deja flotando libremente en la cavidad gástrica; al ocupar una gran parte del estómago y dificultar su vaciado, produce una disminución de la sensación de hambre y la aparición de saciedad precoz al comer. Con estos dos efectos es más fácil seguir una dieta adecuada y poder cambiar los hábitos dietéticos y de ejercicios necesarios para conseguir una pérdida de peso y mantenerla los meses siguientes
¿Con qué médico debe acudir?
La colocación de un balón intragástrico debe ser realizada por un médico especialista en Endoscopia Digestiva con experiencia en el procedimiento, e idealmente que cuente con un equipo multidisciplinario para el seguimiento nutricional del paciente durante el período de tratamiento.
El gastroenterólogo/endoscopista controlará la eficacia del tratamiento y la aparición de posibles síntomas derivados de la colocación del balón.
Después del tratamiento
Los primeros días el paciente puede experimentar sensación de náusea o vómito, pasado este tiempo los síntomas tienden a desaparecer y el paciente únicamente notará que se llena con menor cantidad de comida.
Duración
La duración del balón depende del modelo utilizado, el Orbera se retira a los 6 meses y el Spatz 3 se retira después de 12 meses.
Para ello hay que repetir la endoscopia, desinflar el balón y extraerlo por la boca.
Recomendaciones
Después del tratamiento se requiere la atención de un nutriólogo para seguir una dieta adecuada e ir modificando los hábitos alimenticios.
Se aconseja la colocación en pacientes con IMC superior a 27, está contraindicado su uso en personas con cirugías previas de estómago, embarazo, enfermedad inflamatoria intestinal y diabetes descompensada.
Artículo publicado en la revista Misión Salud | Año 2 | No. 22